En el corazón de Santiago de Compostela encontramos un tesoro verde que cautiva tanto a locales como a visitantes por igual: el Parque de la Alameda. Con la llegada de la primavera, este espacio se viste con sus mejores galas, ofreciendo un escenario encantador que invita a sumergirse en la naturaleza y la historia de la ciudad. Si lo quieres descubrir mientras estás alojado con nosotros, debes saber que el parque está a escasos kilómetros de nuestro hotel en Santiago. Pregúntanos en recepción cómo llegar y te lo indicaremos.
Un parque dividido en tres áreas
A pesar de ser conocido como la Alameda, este parque abarca tres áreas distintas: el paseo de la Alameda, la mágica carballeira de Santa Susana y el tranquilo paseo de la Herradura. Juntas, conforman un enclave que desde el siglo XIX ha sido uno de los epicentros más bulliciosos de Santiago. Su ambiente acogedor lo convierte en un auténtico enclave natural que atrae a quienes buscan relajarse y disfrutar de la belleza verde.
La ubicación estratégica del parque, bordeando parte de la ciudad histórica, ofrece una perspectiva magnífica de su fachada más monumental. Está reconocido como el principal jardín urbano y destaca por su diversidad y la majestuosidad de sus árboles y plantas ornamentales. Los robustos robles, los imponentes eucaliptos y la encantadora pérgola con vistas conformada por los castaños de Indias en el paseo de la Herradura son solo una muestra de su esplendor botánico.
Un lugar de pasado y presente
A lo largo del tiempo, este parque tan cercano a nuestro hotel en Santiago ha conservado las marcas del pasado en su distribución. Los corredores del siglo XIX destinados a diferentes estratos sociales, el arco casi triunfal que conduce al Paseo de los Leones y la disposición de parterres, fuentes y estanques son testigos de la evolución histórica. Las edificaciones de diferentes épocas, desde las decimonónicas hasta las modernistas y actuales, como la capilla de Santa Susana, la iglesia del Pilar, el palomar, el quiosco de la música y los emblemáticos bancos graníticos, reflejan la riqueza arquitectónica y cultural del parque.
Con una extensión de 85.000 m2, este remanso de paz ofrece un recorrido de aproximadamente 30 minutos, ideal para sumergirse en su belleza natural y monumental. Sus suaves pendientes, zonas sombreadas, extensos prados y bancos de descanso te invitarán a disfrutar de momentos muy relajantes a lo largo de tu estancia en Santiago de Compostela.
Adéntrate en la Alameda durante la primavera y déjate cautivar por su encanto. El parque está abierto las 24 horas, cuenta con iluminación nocturna y posibilidad de visitas guiadas. ¡Este tesoro natural te espera para ofrecerte una experiencia inolvidable en Santiago de Compostela! No te pierdas la oportunidad de explorar este oasis urbano mientras estás en Hotel Castro y contempla cómo conserva la esencia histórica y la belleza natural en cada rincón.